Para Piel de Bovino:
1. Limpia regularmente con un paño suave y seco. Si es necesario, usa un paño ligeramente húmedo.
2. Si se moja, seca el calzado con un paño absorbente y déjalo secar al aire, lejos de fuentes de calor directo.
3. Aplica un producto de hidratación para cuero cada 2-3 meses para mantener su flexibilidad.
4. Evita el contacto con objetos punzantes que puedan dañar la superficie.
5. Guarda el calzado en un lugar fresco, seco y alejado de la luz solar directa para prevenir la decoloración.
6. Usa un protector contra el agua para prevenir manchas y daños por humedad.